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Mostrando entradas de 2014

Adelanto de Breve estudio de los terrores mundanos

La portada es otro acierto de Jorge. Así arrancará Breve estudio de los terrores mundanos , que incluirá trece cuentos de terror, una sorpresa y un hilo conductor que es mi propia biografía entre 1979 y 1981, cuando niño.  Mi intención es corregir sus más de un centenar de páginas y ponerlo en Amazon por menos de 3 euros, como la antología de cuentos anterior. Por el momento podéis disfrutar de Un puñado de cuentos y una huida . Como prometí, las primeras páginas de Breve estudio de los terrores mundanos .

Descarga gratuita de Un puñado de cuentos y una huida

Me ha costado dar el paso, pero mi idea es concentrar toda mi obra literaria, que es mucha y anda desperdigada, para publicar gran parte de ella en Amazon. Lo primero que  publicaré será una antología donde recojo mis primeros cuentos. Se titula Un puñado de cuentos y una huida , y para entender el título hay que leer el prólogo. Como lo que quiero es compartir mi experiencia con el máximo número de lectores, del 22 al 26 de diciembre del año moribundo estará disponible gratis para su descarga desde el enlace siguiente: DESCARGAR el libro de cuentos. Sí, has oído bien: gratis, completo, y sin trucos.

A un amigo que se fue y no murió en el intento

Morir y nacer; nacer y morir. Así sucesivamente. La metamorfosis de amigo a conocido es un proceso natural que en algunos seres humanos, pongamos mi caso, produce un agudo malestar. No debería causar dolor alguno, pues se trata del orden natural de las cosas. En realidad, los ingredientes de la vida mutan continuamente. Más peligroso es el momento en el que descubrimos realidades estancadas, aparentemente inmutables. Como en los estanques en los que el agua no fluye, los organismos se pudren y el propio agua pierde sus propiedades o, mejor dicho, adquiere otras que le dan ese aspecto putrefacto e insalubre. En realidad, cientos de miles de gérmenes y bacterias se reúnen allí donde creemos que no ocurre nada.

Que los desmonten otros (a Podemos)

Pasan los días y uno se asoma a los quioscos con la curiosidad de saber cuál será el próximo pase de los que quieren desmontar a Podemos. Hay una insana necesidad de pillar en falso cualquier movimiento de cualquiera de los nombres que han salido a la luz de la organización liderada por Pablo Iglesias.

Vergüenza futura

El efecto Operación Triunfo sobre un PPero en un país de risa. Miramos a los griegos clásicos con condescendencia. Localizamos el Monte Olimpo en cualquier mapa digital y nos parece mentira que creyeran que allí vivían Zeus y sus lacayos. Pasamos las páginas de la Edad Media con desdén, sobre todo cuando tratan de ciencia, medicina, etc. Qué idioteces llegaban a hacer para nada. ¿Alguien sobrevivía a las sangrías? Una gripe era capaz de matar a una generación entera. Estúpidos.

Sin Estado, sin Gobierno

¿Hacen falta fotos como ésta para apelar a la justicia social? Vivimos sin Estado porque no hay ningún mecanismo legal ni de carácter general ni extraordinario que impida el desalojo de su vivienda a una octogenaria. Los bancos mandan y la ley que impera es la de tanto tienes, tanto vales. Diez mil cochinos euros de hipoteca no deben representar en las ganancias de los bancos, a cuya bonanza la anciana contribuyó, como todos, con el rescate, ninguna cifra capaz de levantar un uno por ciento.

En defensa de Miki y Flo

Alguien tiene que dar la cara por dos profesionales de la comedia que nunca llegarán a alcanzar el estatus de estrellas del humor. Me refiero a Miki Nadal y a Florentino Fernández, alias Flo. Cada uno de ellos lleva entre quince y veinte años sin bajarse del candelero y a pesar de que siguen en edad fértil ya saben que cuando se retiren nadie los recordará en un país tan poco exigente con los humoristas como España. Un país en el que, desde que nací, Miguel Gila es venerado como el mejor en su profesión (sector televisivo) y en el que aún se recuerda con nostalgia a fenómenos de otra galaxia como el dúo Sacapuntas, Arévalo y otros personajes que en el Reino Unido no habrían hecho ni los lavabos de la BBC. Hay que remontarse a finales de los noventa para asistir a la irrupción del último fenómeno televisivo del humor, Chiquito de la Calzada. Recordemos que José Mota ya tenía el culo pelado de hacer programas. Y sí, Joaquín Reyes ha resultado un feliz hallazgo, y no digamos Berto

El secreto de Bretón (reflexión a partir de la lectura del libro)

Al hilo de la lectura de El secreto de Bretón, de Vicente Garrido, un ensayo-crónica que me ha parecido irregular porque juega con el lector hasta defraudarlo, pues no hay tal secreto, me surgen varias preocupaciones. La primera: ¿cómo se puede considerar, digan lo que digan los expertos, que José Bretón no sufre ningún trastorno psicológico ni psiquiátrico? Los expertos alegaron en el juicio que se trataba de una persona normal. ¿Cuántas personas normales conocemos capaces de asesinar a sus hijos y, al cabo de unos minutos, flirtear con una conocida? Ni siquiera lo etiquetaron como obsesivo compulsivo a pesar de que no toleraba que nadie tocar a sus hijos con las manos sucias. También pasaron por alto su intento de suicidio a los 24 años.

Empleados más puteados del mes (Cash Converters)

Es una franquicia que no ha dejado de crecer con la crisis. Sin embargo, y a pesar de abrir nuevos locales, todo apunta a que les va fatal. Lo primero que percibes es que los empleados no cobran incentivos por vender más, o si los reciben, son de pena. Haz la prueba. Intenta entrar cuando quedan diez minutos para el cierre. De repente, todos desaparecen hasta que a menos ocho minutos una voz cavernosa te invita a marcharte. Inmediatamente, la persiana cae como si fuera confeti. Luego está el mal rollo entre ellos. El otro día un señor me atiende en la zona en la que te compran los productos, bastante sórdida siempre, y llegan dos compañeros con un avioncito teledirigido. Poco más y se los come. Delante de mí y sin reparos, les echó una bronca de mil demonios.

La amistad, KO por (el) Sistema

Por favor, que ninguno de mis amigos se vea amenazado por mi artículo. Para mí la amistad es uno de esos temas tabú que me interesan especialmente y no puedo ni quiero defenderme de susceptibilidades ajenas. ¿Queda aclarado? Pues, adelante. Que entre tantos libros de autoayuda que acorralan al resto de secciones de las librerías no haya apenas referencia a la amistad debería dar que pensar. Si el Sistema nos impele a sacar lo mejor de nosotros mismos; si el miedo al futuro corona nuestras cabezas; si la moda que impera es lo personalizable, lo diferente y si sólo formamos piña cuando alguien, sin abusar, nos convoca para gritar un mismo lema; entonces, es complicado eso de cultivar la amistad. Decía alguien que un amigo es que el te critica en persona y te elogia por la espalda. ¿Pero quién dedica su tiempo a buscar soluciones a los posibles problemas de un amigo? ¿Quién se atreve a decírselo a sabiendas de que el otro le recordará que nadie es perfecto?

De secundaria a primaria sin pasar por el psiquiatra (memorias de un sustituto, volumen 213)

Héme aquí, tan de repente, cambiado de profesor de inglés para mozalbetes de hasta 18 años a maestro multiusos para infantes. ¿Por qué? Pues porque dejé la opción marcada "disponibilidad para primaria" y tuve la suerte (discutible) de quedarme con una sustitución en un colegio. Yo, que tenía experiencia en clases de inglés para adolescentes y adultos, que tengo muchas tablas en el mundo editorial y la escritura creativa, que no tengo ni idea de cómo tratar a una criatura de, digamos, 8 añitos. Como el hambre aprieta, accedo a tomar posesión. Y enseguida noto que el trabajo sin descanso no sólo no da un fruto tangible, sino que provoca molestias a distancia. Es decir, en las familias, que o me han puesto una cámara, o tienen el don de la invisibilidad y se filtran en mis clases.

Los profesores de instituto y su verdadera labor (miserias de un sustituto, volumen 745)

El sueño de algunos "profes" de secundaria. En cada instituto en el que he estado me he encontrado con un batallón de profesores que resiste al sentido común y proclama a los cuatro vientos: yo enseño mi materia y punto; que los eduquen en los colegios. Hablamos de enseñanza pública y de alumnos que tienen entre 12 y 18 años. Recordemos que en España es obligatorio estudiar hasta los 16. Es decir, los institutos están poblados de niños y adolescentes que no tienen otro remedio que acudir a los centros de secundaria. No van de motu propio ni tienen por qué cumplir con las expectativas del alumno ideal. Si, además, ojeamos los distintos decretos educativos vemos cómo las normativas insisten en el seguimiento de los alumnos y en la importancia del proceso educativo (del Decreto de Secundaria de Catalunya: "el objetivo de la educación es formar al alumnado como personas", etc.). Podría poner que el objetivo es llenar de conocimientos científicos, matemáticos o

El colegio es mío (miserias de un sustituto, volumen 1.023)

Compañeros de trabajo bien avenidos y asentados. Cuesta creer que en un centro de enseñanza público un puñado de hombres y mujeres se enroquen entre sus paredes, marquen su territorio y defiendan su estatus de veterano contra cualquier recién llegado. Como entras en su casa te reciben con cortesía, pero sientes que ya te han sentado en la tribuna de los acusados y una vez empieza el juicio ya no hay manera de cerrarlo si no es con una sentencia firme. Pasa en la mayoría de trabajos. El núcleo duro se siente inseguro a la que reciben un currículum. Y en cuanto ese papel muta en "el nuevo" (o la nueva) sus debilidades humanas les llevan a mostrarse encantadores, porque cualquier novedad resulta atractiva en los cortijos cerrados. El embrujo de lo nuevo dura poco (las personas, todas, acaban oliendo a algo terrenal). Eso en cuanto a los peones. Los jefes ya han iniciado el proceso: te están evaluando cuando todavía no has dado los buenos días. En un colegio público to

El día que partas en busca del conocimiento

La teoría es un poco complicada de entender, pero merece la pena que te esfuerces en ver si te parece lógica. Te lo advierto, eso sí, puede que no sea demasiado optimista. Cuanto más sabes sobre diversos asuntos y cuanto más intentas arañar de todos ellos a la vez, más idiotas eres. Al ritmo de vida que llevarás en el momento de leer esto, puede que esta teoría se dé tan por sabida que nadie se acuerde de que está ahí. De lo que no me cabe duda es de que me va a sobrevivir.

Año terrenal 2018

Un grupo de políticos muy españoles y algún catalán. Bien por Santiago Segura que se ha estrujado los sesos rediseñando un guión que daba por hecho la creación de Eurovegas en Madrid. Tiene razón (él, y las decenas de manos que le han ayudado en el guión). Lo peor de este país es que estamos condenados a cometer los mismos errores elevados a una potencia X, que es la única incógnita por despejar. No sé si Catalunya se independizará, pero estoy seguro de que los gobernantes aquí y allá mantendrán un alto contenido en chorizo de baja ralea. Será de Vic o será de Guijuelo, pero será chorizo.

Asco

De la gente que te adelanta por la izquierda o por la derecha y te corta el paso hacia el cajero y cuando se da cuenta de que no funciona, en lugar de avisarte, se larga mirando hacia otro lado. De la impunidad de los políticos, sindicalistas, banqueros, principescos, cortesanos y plebeyos que roban sin sufrir escarnio alguno. De las arbitrarias tomas de conciencia de la sociedad. Lo mismo se manifiestan por la anulación de una corrida de toros que se quedan en casa cuando se destruyen millones de puestos de empleo y, para colmo, se disparan los precios. Ah, y la culpa es de los trabajadores.

El reinicio constante

Si la película Volver a empezar, de José Luis Garci, parece, sacada de contexto, una obra que reivindique el derecho a perpetuarse, mi vida, en cambio, tiene mucho que ver con el resto de vidas con las que me voy cruzando: y es que cada cierto tiempo me toca reinventarme. Soy amigo de algunas personas que hubiera preferido no conocer y, mira por dónde, gente que me interesa de veras queda lejos de saborear un café conmigo. He viajado allá donde me ha permitido el bolsillo. Islandia, La India y Nueva Zelanda siguen ahí, en mi idolatría, pero nunca hay billetes para mí. He sido fraile antes que monaguillo en el mundo editorial. Hoy nadie me recuerda en ese zoco árabe del que tampoco guardo estampas memorables.

Entre la niebla de España desde Catalunya o viceversa

El dibujo es bueno. El mensaje, mentira. Recuerdo que, en Catalunya, hace diez años el sentimiento separatista se inflaba desde las nueve de la mañana del 11 de septiembre hasta las once o las doce de la noche del mismo día. Los discursos de la mayoría de partidos catalanes (excluyamos al PP, que siempre ha sido una franquicia del partido estatal e incluyamos al PSC de entonces, que todavía no se había convertido en una filial de la central madrileña) sonaban altisonantes y exaltados. La gente enarbolaba sus banderas independentistas y, entre medias, había otro tipo de personas que aprovechaba el día de fiesta para pasear, entrar a los museos, etc. Al día siguiente, sobre todo si hablaban desde el Congreso en Madrid, los discursos de los políticos catalanistas sonaban mucho más tibios, casi aguados. A los catalanes, si creían en la independencia, no se les notaba en su trabajo diario ni en los bares. Era un asunto íntimo y, en algunos casos, un sentimiento de vuelos bajos.

Antes de un examen...

O de una entrevista de trabajo o de una prueba con el Barça. Lo que te pide el cuerpo es aislarte en el contenido del examen, infiltrarte en un mundo artificial hasta obsesionarte. Piensas que si no estás suficientemente obsesionado no te has implicado como deberías. Por tanto, te arriesgas a... ¿Suspender la prueba? No, te arriesgas a sentirte culpable si el resultado es negativo.

Insolidaria Barcelona

Unos hipsters de Barcelona vistos a través de rayos X. Tras un periplo por media España pensé que ya había visto suficientes idiotas (el veinteañero que le explica a un viejo sordo las diferencias entre los templos budistas de Japón y los de la India, el taxista que se vuelve loco de repente y deja de mirar a la carretera elogiando a Podemos, etc.) hasta que llegué a mi pueblo. Allí, los que eran tontos siguen siendo tontos, y los que no, pues lo mismo. Salvo que me maravilló descubrir gente de fuera tan interesante inasequibles al contagio, y noté la ausencia de amigos y conocidos que le dan al cerebro y que, con su ausencia, dejaron en evidencia a los demás. Una pena. Ah, y un placer compensatorio (de sobras) los pocos amigos y los familiares que me han dado momentos de alegría.

Deja que se vaya

El caprichoso fluir de las cosas y de los seres que habitan un Universo que roza la armonía sólo se puede detener mediante un péndulo que se valora desde un estado interior y, por lo tanto, subjetivo. Es la fuerza de voluntad. Por la particular fuerza de voluntad de cada cual se logran proyectos que consiguen perdurar en el tiempo e incluso pueden crear la ilusión de un continuum en los logros humanos. Así, con los siglos, reunimos todas las obras de un conjunto de esfuerzos pretéritos y conseguimos observar civilizaciones, sagas y vidas de personajes, que es, desde luego, el reclamo principal a día de hoy. Hay quien cree que el que quiere algo lo consigue, que basta con proponérselo (y trabajar, añado yo), y por varios motivos la fuerza de voluntad se ha revalorizado mucho. No es de extrañar teniendo en cuenta que el principal anzuelo de una economía capitalista es que cualquiera puede enriquecerse, independientemente de bla, bla, bla...

Empezar por el principio: las cuentas del fútbol

Todos son amigos. Todos son ricos y famosos. Tomaré como modelo los clubs más importantes de fútbol en España: el F. C. Barcelona y el Real Madrid. El Barça lleva varios años fichando pocos jugadores, si bien cuestan un dineral, pero lo cierto es que cada vez que se interesan en un futbolista, el deportista vuela a otro equipo. ¿La razón? Podría ser que, como aseguran algunos, Andoni Zubizarreta entre en las enciclopedias como el secretario técnico más incapaz de la historia. También puede ser que los demás equipos les ofrezcan mejores contratos y paguen más dinero a los clubs de origen por su contrato. Recordemos que un jugador de fútbol tiene dos precios. El que tienes que pagar al club donde juega y el que percibirá el futbolista cuando lo contrates.

Cementerios vacíos bajo la luna nueva

En un corto trayecto en metro y, luego de paseo, me he encontrado con tres parejas discutiendo. En una de esas escenas, ella y él, muy jóvenes, estaban locos por abrazarse y reafirmar su amor con un beso, pero no podían hacerlo. Había una fuerza centrífuga que lo impedía. Al resto de parejas he preferido verlas de soslayo. Más tarde he dicho en voz alta: "seguro que hay luna llena". Casi he acertado y prometo que no me pierdo en los tejados de Barcelona intentando atravesar la contaminación lumínica y tóxica. El sábado, si el calendario lunar no se equivoca, habrá un ojo más en el firmamento. Quién sabe si malévolo o loco, como se cree popularmente, o hermoso faro que despeja las tinieblas como prefiero considerar a este fenómeno óptico, tan irreal o cierto como su contrario, que es la oscuridad de la luna nueva. Esta  noticia  (haz clic en la palabra, por favor) no es tal, porque para serlo tendría que ser nueva, como la luna que, callada, sirvió de cómplice a los trág

Profanan el cielo de Barcelona y luego... el silencio

Imagen que recuerda a lo que vi, pero más concurrida. Doce de las madrugada del 7 de julio en pleno centro de Barcelona. Un sábado a las doce y media de la noche. Uno se espera cualquier escena excepto que los turistas y barceloneses señalen el cielo con una sonrisa en los labios. Miras hacia arriba y ves dos luces sobre los edificios más altos de la ciudad. Descartas que se traten de aviones, porque las dos luces se desplazan muy cerca la una de la otra. Van demasiado lentos para tratarse de aviones comerciales o cazas. Sean lo que sean, vuelan demasiado alto para ser helicópteros y demasiado bajo para tratarse de aviones. Los dos vehículos, porque no crees en dragones, se desvanecen en la inmensidad de la noche. Las grandes torres de la ciudad como testigos y algunos curiosos que enseguida dejan de mirar hacia arriba.

Cero en culpabilidad

Después de un curso y un principio de año movidito en cuanto a las relaciones personales, podría pensar que voy por mal camino, que mis problemas con los seres humanos me retratan como un tipo conflictivo, culpable de todos los males que le persiguen. Sin embargo, de lo único que me declaro culpable es de equivocarme por el mismo motivo que acierto en otros asuntos, porque tengo derecho a hacer las cosas mejor o peor según las circunstancias, porque no soy inmune al error y, por ende, desconozco la fórmula mágica para actuar siempre en virtud de unos principios éticos que, además, suelo revisar cada cierto tiempo.

El curso más amargo

Antes de pasarme a la enseñanza, sufrí todo tipo de humillaciones en el ámbito de la empresa privada, ni más ni menos que otros, pero igualmente dolorosas. Recuerdo que, trabajando de teleoperador, me cayó una bronca por utilizar dos veces seguidas el sistema de reclinación de una silla. Recuerdo que una chica de más o menos mi edad me gritó: "¿Es que quieres romperla?" En otra ocasión, mi coordinadora me amonestó por ir al baño tres veces en ocho horas. Pero no todos los abusos ocurren en los denominados trabajos basura. Trabajando en una editorial me llamaron al despacho del gerente porque un tipo que se llamaba como yo había escrito un artículo en una revista de una editorial de la competencia. No tenía contrato de exclusividad (sólo faltaba con la miseria que cobraba), pero el gerente me anticipó que era un asunto muy grave dado que ellos publicaban una revista de la misma temática. Delante de mis narices llamó a la editorial y le confirmaron el segundo apellido

Últimamente siempre estoy con lo mismo

Es verdad, mi conciencia no me deja escribir de otra cosa. Y sé que hay lectores que se aburren, bien porque creen que todo está dicho, porque se aferran a Internet como el que se abraza a una botella de vino, o porque consideran, con buen juicio, que ya hay firmas que sacan conclusiones más inspiradas en torno a la crisis, la corrupción, los dramas sociales y el polvorín en el que se ha convertido el planeta. Lo sé. Y, sin embargo, sigo a lo mío. Mira que hay temas preferibles a la situación política y económico-social de España y Catalunya. Es uno de los problemas de optar por vivir informado en tiempos turbulentos. Ya me gustaría hablar de mis lecturas: ahora mismo, con lo machadiano en Unamuno y lo unamuniano en Machado, y recién terminada una novela gráfica magnífica: El arte de volar.

Podríamos

Da la sensación de que todo va bien cuando sales un día festivo a la calle y los restaurantes y las cafeterías están llenas, y la gente inunda las calles cargadas de bolsas de las franquicias de siempre. En el paseo marítimo o por la alameda, quien más y quien menos estrena ropa nueva, zapatillas de marca, una bicicleta o un patinete. Un domingo por la tarde, por más que se empeñen en vendernos lo contrario, hay cola en los cines, sobre todo en los centros comerciales y lo único que me enerva es que da igual lo que proyecten. Podrían exhibir films de serie B de los ochenta con pósters actuales que la gente compraría igual su entrada. Existe la necesidad imperiosa de desinhibirse.

La mafia española y la alegría de los indultos

Ministerio de Indultos, según Ferran Martín . Al más injusto ministro, Alberto Ruiz Gallardón, le ha venido muy bien que uno de sus hijos se dé a la fuga tras provocar un accidente de circulación en Madrid. Por lo visto, además, conducía en estado de embriaguez. Y no es la primera vez que su nombre sale a colación en  asuntos turbios . Desde luego, no tiene nada que temer, porque en la España de la derecha católica nadie ligeramente relacionado con las élites del poder rinde sus cuentas ante la justicia (desde otros episodios automovilísticos hasta tragedias de militares  muertos en oscuras circunstancias). Le ha venido de perlas al Ministro de "Justicia", porque Google, que es el filtro de los medios de comunicación por excelencia, oculta una noticia que, por sí misma, merecería un cambio legislativo del Estado y el cese inmediato del señor Gallardón. Para que nadie lo olvide, hace tres días Gallardón concedió el indulto a un guardia civil, que en lugar de impedir

Monarquía o República... la disyuntiva insultante

Genial alegoría de la realidad CENSURADA. En un país libre y democrático no habría lugar a dudas. ¿Cuál de los dos sistemas te permite elegir al que consideras mejor Jefe del Estado? Decisión tomada. Ergo, fuera la Monarquía. Sin embargo, España es un estado, no me canso de repetirlo, deficiente en muchos aspectos. La incultura tapada, la que no sale en las encuestas, es de tal índole que desvirtúa cualquier consulta popular y engrandece debates innecesarios como éste.

Vivir con ansiedad crónica

A la pregunta si se puede vivir con ansiedad crónica respondo lo que supongo harían las personas que llevan un marcapasos, padecen diabetes, etc. Claro que se puede vivir. Algunos lo llevarán mejor y, en los casos más extremos, otros se limitarán a sobrevivir. Imagino que cada caso será distinto y creo, sólo creo, que en la mayoría de los casos acaba por prevalecer la fuerza de voluntad de cada uno, su espíritu, al propio mal en sí. Obviamente, cuando tocamos fondo, hay que estar allí, mirando la dentadura de la bestia. Y, aunque a nadie le endulza un cardo, conviene saborear el fracaso. Sólo una primera vez por experiencia. Regodearse en el dolor es masoquismo. En cualquier caso, en cada bajón conviene esperar a que pase el tiempo. Tarde o temprano, en la oscuridad se enciende una luz (perdón por la horterada). Eso sí, a la que podamos salir del hoyo, un saltito y luego otro hasta… avanzar hacia la superficie o resbalar de nuevo. Pero poco a poco. Tanto para subir como para c

Luchar sí, pero vamos a reivindicar los derechos vitales

Desde el respeto a todo el mundo.  Me gusta la idea de poder votar si queremos rey o no. Estoy a favor del dret a decidir en Catalunya, claro. No me parece de recibo que echen a patadas a los okupas de un centro cultural. Ni me agrada que en un barrio de Burgos hagan parkings para que ganen dinero unos cuantos en contra de los vecinos.  Sin embargo, no voy a ir esta tarde a ninguna plaza a hacer piña a favor del referéndum sobre monarquía o república , a pesar de que me considero republicano por fuerza, o sea, por sentido común.  ¿Y por qué tomo esta decisión?

Abdica el Rey Juan Carlos I: Fin de la transición

Por tus actos te conocerán, Rey. De todos es sabido que a Juan Carlos I lo preparó personalmente Francisco Franco para que lo relevara como Jefe de Estado. Tanto es así, que el Borbón pasó más tiempo con el Caudillo que con su propio padre, exiliado en Estoril. Siempre se cuestionó su reinado, pero el supuesto papel libertador del monarca la noche del 23F de 1981 le salvó de la quema en no pocas ocasiones. Con el nuevo milenio, el fallido golpe de estado cayó en el olvido y la prensa, desvergonzada y casquivana, comenzó a airear las trifulcas de la Casa Real, en especial los desmanes del protagonista.

Madridistas, la décima (todavía) no existe

Hay que conseguirle una camiseta a este hombre!!! Está bien que alguien en este país maldito disfrute por unas horas, y en ese sentido la Copa de la Liga de Campeones ganada por el Real Madrid el 24 de mayo cumplió con su papel. Algunos fueron felices y otros rabiamos como perros. Unos y otros dejamos de pensar en temas importantes por unas horas. La final me pareció previsible y muy mal arbitrada. Previsible porque el Real Madrid jugó mal y se aprovechó de sus mortales zarpazos y el Atlético de Madrid tiró de orden táctico, de empeño y de fuerza, pero faltaron destellos de calidad que sobran en el club blanco. Lo del árbitro es grave: ¡Cinco minutos de descuento! Ni los más viejos de Lisboa… Y ese penalti a poco del final de la prórroga. ¿Era necesario pitarlo si existen dudas razonables y ya ganaban 3-1?

Stop a Cañete. Mis 10 razones para votar... a otr@

Cañete, en los toros mientras ardían tres parques nacionales. Si respetas a las mujeres, a tus hijas, tu pareja, tus amigas, o simplemente, consideras que tu madre no tiene nada de tonta por el hecho azaroso de haber nacido mujer, entonces no puedes votar a Arias Cañete. Y, dado el sistema de recuento de votos, quedarse en casa significa darle el voto a este señor que tanto me recuerda a un espécimen de pelo en pecho, camisa abierta, cinta de El Fary, y calendario de mujer desnuda con el pubis velludo. Sí, no se han extinguido. Además, algunos son multimillonarios, insultan a la mitad de su electorado y viven en barrios exclusivos. La mala educación y la soberbia no saben de títulos universitarios ni nobiliarios. Arias Cañete es el ejemplo vivo de una España rancia y muy viva. Razones para ir a votar el 25 de mayo y no hacerlo por Cañete: 1. El señor Arias Cañete no es la primera vez que demuestra su misoginia. Ya en el 2000 comparó a la mujer con el regadío. Ahora,

El derrumbe de una era en clave de fútbol

Mensaje subliminal para catalanistas y españolistas. Recuerdo tiempos remotos en los que un entrenador de fútbol que consideraba que había fracasado presentaba su dimisión. En aquella misma época, se marchaba un presidente si no conseguía hacer vibrar a la afición, o, al menos, no ganaba títulos. Los más cobardes se resistían a morir y cortaban algunas cabezas para ofrecer una ilusión de cambio. Entonces, también, los jugadores de fútbol se arriesgaban el físico en cada balón disputado. En el caso del baloncesto ocurría lo mismo. Un último minuto duraba siglos, porque nadie arrojaba la toalla y el marcador podía variar hasta el último momento. He visto partidos últimamente en los que el equipo que perdía por seis puntos daba por perdido el encuentro con minuto y pico de tiempo restante. Ayer, el Atlético de Madrid se proclamó campeón de Liga, y a todo el mundo le pareció bien, porque teóricamente es el triunfo del pequeño contra los Goliaths, el Real Madrid y el Barça. La

Modernísimas novelas con principios apabullantes

Seré mal pensado. De paso, seré yo mismo, porque no puedo ser de otra manera. Creedme si os digo que estoy al día de las novelas actuales. Mejor dicho, leo mucho sobre las novelas actuales de escritores jóvenes que publican en editoriales de cierto prestigio. No tiene ningún secreto. Compro muchas novelas, pero sobre todo me nutro de la biblioteca de la Facultad de Letras, de las dos municipales que me quedan cerca de casa y, si no puedo echarles el guante, acudo al ebook o me paso unas horas en la FNAC y ojeo las novelas que me recomiendan desde los suplementos culturales. Unas veinte páginas. Quizá treinta. En realidad, con esta última opción ya me basta para hacerme una idea. La mayoría de las novelas que últimamente han publicado sellos como Anagrama, Tusquets, Candaya y Seix-Barrall y que han tenido cierto ruido mediático me han dado la misma impresión. Muchas plantan una enredadera en la forma que cuesta franquear para palpar el contenido.

Claroscuros en peligro de extinción

La obra de arriba pertenece al artista Philippe Berthier. De bien pequeños nos enseñaron que en la vida existía una amplia gama de colores, y que el negro y el blanco se situaban en los extremos. Me imagino que en alguna materia escolar se debe aprender esta verdad irrefutable hoy como hace treinta años. Últimamente, al menos es lo que detecto, se critica con dureza a la gente que no se moja, que no se muestra partidaria de una opción o de la (aparentemente) contraria. Se les dispara antes de preguntarles por qué toman la decisión de no implicarse. Una persona que no se define sobre un tema aparece como un borrón. Resulta incómoda porque no se le puede encasillar, y nadie puede vender un producto que no se muestra. ¿A qué viene esa urgencia por reclamarle a la gente que se pronuncie con claridad sobre cualquier dicotomía? Supongo que tiene que ver con la necesidad de extraer el máximo beneficio a cualquier actividad, que es a lo que se dedica todo el mundo, y al utilitarismo, e

Vaciado mental con minimonólogo incluido

Mi superego, contra sí mismo. Siempre pierde ¡el pobrecito! A veces no encuentro salida a tantos pensamientos. El cerebro no deja de maquinar situaciones y se me plantean historias, pero también reflexiones, que consumen energías de las que no ando sobrado. Al principio de descubrir que tenía un don y una desgracia, me refiero a mi cuestionable facultad para crear, me sentía muy orgulloso. Sin ánimo de resultar falsamente modesto, ya que en casi todo lo demás resultaba normalucho o insuficiente, al menos me reconfortaba pensar que tenía un espacio en el que destacar: en los pagos de la imaginación.

Seguidillas arromanzadas a la reconciliación con un viejo amigo (JJ)

Son amigüitos, que diría ella. Las ansias de ver al amigo son sólo eso, ansias, y desesperar ante el reloj es mi sola desgracia. En los adentros de cada uno, el tiempo está enterrado y cuando uno cava en la piedra se estanca en el duro fango.

Llanto por mi ex amigo JJ

Eran pasadas las seis. Del sol, ni rastro. Las nubes negras. A las seis en punto, un teléfono mudo, la fe en el pasado aún despierta. La soledad me susurra al oído que no vendrá mi amigo a las seis y media.

Pessoa: un desencuentro. Portugal: una tragedia alemana

Resulta imposible explorar las calles de Lisboa sin pensar en Fernando Pessoa a no ser que seas lisboeta. Lo mismo se aplica a Joyce y Dublín, Gaudí y Barcelona, etc. Por Madrid han pasado tantos genios del mundo del arte y de la cultura que cada uno tendrá su personaje asociado a unas zonas de la ciudad, de manera que habrá quien busque a Valle-Inclán, Galdós, Velázquez o unos jovencísmos Dalí, Buñuel y García Lorca. Ninguno es madrileño de nacimiento, pero de los tres primeros no se puede decir que no representen una porción de la historia de Madrid. En Londres, París y Nueva York sucede lo mismo. Hay quien cree que persigue la sombra dickensiana en la capital inglesa, mientras otros juegan a detectives por Baker Street e incluso los habrá que se pierdan por los andenes de las estaciones buscando a un mago con gafas. Pero volvamos a Pessoa. Reconozco que mi fuerte no es la poesía. Necesitaría bajar un par de velocidades el ritmo de mis inquietudes para saborear los buenos poe

Esperanza Aguirre y otros motivos para incendiar España

Algunas payasadas de la realidad superan cualquier MarioKart . Una ex ministra y ex presidente de la comunidad autónoma más poderosa de un país, Madrid, y que crea que puede desafiar a la autoridad policial y se fugue tras cometer una infracción de tráfico y tumbar la moto de un agente... Los españoles pensábamos que esto sólo ocurría en los países que mirábamos por encima del hombro. Atrás quedaron los dorados años en los que nos compadecíamos de los pobres sudamericanos. Nuestros hermanitos pobres. La España imperial todavía se creía con la catadura moral para observar las corruptelas de Italia como si se tratara de un espectáculo dantesco. Y en Europa del Este, lo mismo, pero sin Martinis ni veleros por el Mediterráneo. Lejos quedan los años de pan y circo en que nos convencieron de que España era el modelo del país desarrollado: buena comida, buen clima, el paraíso del bienestar social, un Estado de derecho comme il fau t, Universidad casi gratuita para todos, trabajos de

Una rebelión anónima, inútil y libremente bella

La idea era ilustrar el texto con algo rebelde. Veo con tristeza que uno se acaba arruinando a sí mismo sin necesidad de que venga el enemigo a descabezarte. Tampoco esperamos a que el sistema nos aplaste. Somos autosuficientes para autoestrangularnos. En los momentos en los que reina la paz, llamamos a la guerra y cualquier objeto sirve como corneta. Cuando podríamos disfrutar de la libertad, nos atamos bien fuerte las argollas. Nos comprometemos con unos horarios y unas costumbres porque nos da la gana. ¿Por qué cenar en casita cada noche? ¿Por qué cenar? ¿Por qué quedarse en casa?

Responsabilidad para autoayudarse en el día a día

Sin restarle méritos, Freud ya ha caducado. Nos guste o no en algún momento habrá que aceptarlo: somos plenamente responsables de nuestros actos. Qué mal nos quieren los dañinos seres queridos que buscan el camino fácil: señalar al resto de la humanidad como culpables. Seguro que de pequeños nos hacían mil perrerías para que andáramos pronto y bien (por miedo a que saliéramos torpes o algo peor y, así, ellos mismos quedaran desacreditados como antorcheros del ADN bueno). Por eso, cuando nos caíamos le pegaban golpes simulados a la baldosa repitiendo con voz estúpida: "mala, mala, mala". Y los bebés lo repetíamos, claro. Creo que en el ejemplo anterior empiezan muchos dramas de cientos de miles de adultos.

Fins aviat Fayzan

Un faisà simpàtic i innocent, com tu. Benvolgut Fayzan , El teu non semblava el d’un ocell, dit en castellà, perquè tothom el pronunciava “faisán”. I el primer dia, me’n recordó com si fos avui, et vas presentar: "Hola, jo sóc Fayzan". Amb un to agut molt delicat i infantil, com el d'un ocellet. No sabies per què anaves a una mesquita i jo et tractava d’explicar les diferències entre el cristianisme i l’islam per fer-te veure, al meu pobre parer, quines coses estranyes trobaries en el món que t’envoltava a Barcelona. No sé si pagava la pena. Els adults compliquem massa les coses. Potser es pot viure sense que calgui trobar-li una explicació a tot.

Redescubriendo temas musicales: Jesus to a child

Las canciones que más adentro nos logran tocar son, en ocasiones, las más sencillas. La letra de Jesus to a child descolocará a los que asuman, por desconocimiento, que la belleza de la expresión escrita requiere complejidad. La sintaxis es clara, el vocabulario, sencillo, y la composición en su conjunto constituye una metáfora: el amante sufre la pérdida del ser querido, pero a pesar de la tristeza es capaz de comparar el hallazgo del amor verdadero con la limpieza de corazón con la que Jesucristo amaba a los niños, que son, por antonomasia, los seres humanos más puros que existen. Por este motivo, mucha gente interpreta la letra como una exaltación de los sentimientos nobles y, en realidad, la letra se puede explicar en clave de amistad idealizada o de amor perfecto en cuanto en tanto no deja lugar a la contaminación de otros sentimientos que no tengan que ver con la piedad y el desprendimiento.

Unos Oscar de bajos vuelos, pero muy aleccionadores

Bruce, ni falta que te hace el Oscar. Según los académicos estadounidenses, la mejor película de habla inglesa es Doce años de esclavitud. Supongo que la comunidad negra, o afroamericana como la llaman por allí, estará contenta, porque cualquiera que haya visto el resto de films candidatos se sentirá defraudado. Exactamente... ¿por qué es la mejor película? No tiene el mejor guión ni los mejores actores ni la mejor fotografía ni, lo que importa, añade nada nuevo a la historia del cine y, por encima de todo, no aporta más que lagrimitas al espectador. Luego, van y le dan el premio al mejor director a Alfonso Cuarón, que ha confesado mil y una veces que no habría podido realizar Gravity sin su equipo técnico y, sobre todo, sin su hermano. Si el mérito está en los efectos especiales y en la planificación al detalle del story board y la paciencia de los actores; si Alfonso Cuarón no la habría podido dirigir solo. ¿A qué viene este premio?

Refurbishing people

A cada cual con lo suyo. Esas tardes en las que pensar en el trabajo te reduce a migajas, hacer equilibrios para quedar con los amigos se te hace cuesta arriba, tu pareja parece hablar un idioma distinto (o no está), y los paseos por el barrio se vuelven repetitivos como la programación de la tele. Esas mañanas, incluso, en las que te levantas y descubres, molesto, que cada una de las cosas que estaban por la noche en el salón siguen en el mismo lugar, pero con un veinte por ciento más de polvo.  Los sábados, malditos sábados, en los que si no te gusta poner la casa patas arriba para limpiarla, si no quieres conducir hacia el centro comercial y cargar el coche con la compra semanal, sólo te queda apuntarte a una actividad en grupo con gente a la que no conoces, o acudir en pareja al teatro o al cine (¡otra vez!) o, en suma, repasar la agenda del sábado y gastarte una pasta para acabar el día bien.

Un momento en la vida

Así te quedarás si sigues leyendo esta bazofia. Llega un momento en la vida en el que te cambia el chip. El ahora se revela como el único instante en el que merece la pena centrarse, porque sólo en el presente podemos dirigir nuestras acciones y, además, gozar del momento. Revivir el pasado es pasar álbumes de fotos vacíos que rellenamos con los caprichos de la memoria. Apuntar demasiado hacia el futuro es una fantasía que en el mejor de los casos sólo nos puede acarrear problemas nerviosos. Como mínimo, frustración. Esto del cambio de chip no se puede programar con un par de clics de ratón. Habrá quien, a las primeras de cambio, sea capaz de efectuar el cambio, pero para la mayoría de nosotros no resulta tan sencillo… Puede que, a pesar de que los libros de autoayuda se repiten como el ajo, cada uno de nosotros tenga una idea de lo que es vivir en modo negativo y vivir en modo positivo y, además, resulte más complejo que las cuatro recetas básicas para vivir sin preocupac

Hasta siempre Pedro J., porque nunca te irás del todo

La gran mentira a la luz de la entrevista de Jordi Évole a Pedro J. Ramírez no está en lo que reconoce el ex director de El Mundo, ni en la supuesta inquina que pone Évole en sus preguntas a Pedro J. Como siempre, la gran farsa está en el tratamiento de los temas. Es muy fácil: se pasa de puntillas sobre los asuntos espinosos, se recalcan los menos importantes y se evita hablar de los realmente comprometidos. Es intrascendente que Pedro J., tras cierto acoso por parte de Évole, admita que no descarta que ETA esté detrás del 11M, pero que parece improbable que así sea. Analicemos: sí, pero no. ¿Un insulto a la inteligencia de millones de televidentes? En realidad, sólo está enrocándose en la postura de la ultraderecha española y, al mismo tiempo, tratando de no quedar como un estúpido ahora que en teoría lo han cesado.