Ir al contenido principal

Irresponsables, vosotros quisísteis la huelga

Sí, os apunto con el dedo. Votasteis al partido de la derecha reaccionaria, la que sólo mira para el lado de los empresarios con la excusa de que ellos crean empleo. Pero olvida que sin trabajadores no hay empresas que valgan.

Aunque ahora no importa tanto que la derecha española sea cavernaria. Lo que importa es que el PP sigue al dictado en temas económicos lo que dice su matriz europea. Y quien la gobierna se llama igual que quien maneja los hilos de la economía de Europa: Angela Merkel.
En Economía hay tantos profetas como intereses y todas las medidas que se imponen a los países más débiles de la Unión Europea están encaminadas a que los ricos sean más ricos y los pobres más pobres.

El señor Rajoy sería capaz de beber del orinal donde mea Merkel con tal de obtener los parabienes del partido popular europeo. Parabienes que darán un rédito inmediato al Presidente del Gobierno y a sus allegados. La cúpula del PP se asegurará así su futuro profesional y económico. De paso, los empresarios españoles se frotan las manos.

Si restamos a los dirigentes del PP y a los grandes y medianos empresarios de la población española no deberían llegar a medio millón de personas. Sin embargo, al PP lo votaron ocho millones y medio de españoles. Y si sacan adelante la reforma laboral, afectarán no sólo a 50 millones de españoles sino a varias generaciones.

Irresponsables, leed bien los programas políticos, seguid las noticias desde la amplitud de miras y vuestro sentido crítico, y votad en consecuencia. Porque habéis regalado vuestro voto a quién os está fustigando ahora.

Y los que no fuísteis a las urnas porque os consideráis más inteligentes y más preparados que el resto y sabíais lo que se nos vendría encima de ganar la derecha, a vosotros os digo: irresponsables por partida doble.

Ahora, id a la huelga general y preparaos para las siguientes, pero cuando volváis a votar haced un esfuerzo y obrad conforme a los intereses de la mayoría de personas que os rodean, que no son ni Pedro Jota ni la Duquesa de Alba ni el Rey Juan Carlos I de España y olé.

Comentarios

Entradas populares de este blog

GTA V no es un juego para niños

He sido monaguillo antes que fraile. Es decir, he pasado por una redacción de una revista de videojuegos y desde hace más de cinco años me dedico a la docencia. De hecho, cuando nuestro Gobierno y la molt honorable Generalitat quieran, regresaré a los institutos y me dedicaré, primero, a educar a los alumnos y, en segundo lugar, a enseñarles inglés. Por este orden. Calculo que más de la mitad de mis alumnos de ESO (de 12 a 16 años) juegan a videojuegos con consolas de última generación, esto es, PlayStation 3 y Xbox 360 (dentro de unos meses, esta información quedará obsoleta: hay dos nuevas consolas a la vista). Deduzco, a su vez, que de este alto porcentaje de estudiantes, la mayoría, y no sólo los niños, querrá hacerse con el último título de la saga GTA: la tan esperada quinta parte.

Redescubriendo temas musicales: Jesus to a child

Las canciones que más adentro nos logran tocar son, en ocasiones, las más sencillas. La letra de Jesus to a child descolocará a los que asuman, por desconocimiento, que la belleza de la expresión escrita requiere complejidad. La sintaxis es clara, el vocabulario, sencillo, y la composición en su conjunto constituye una metáfora: el amante sufre la pérdida del ser querido, pero a pesar de la tristeza es capaz de comparar el hallazgo del amor verdadero con la limpieza de corazón con la que Jesucristo amaba a los niños, que son, por antonomasia, los seres humanos más puros que existen. Por este motivo, mucha gente interpreta la letra como una exaltación de los sentimientos nobles y, en realidad, la letra se puede explicar en clave de amistad idealizada o de amor perfecto en cuanto en tanto no deja lugar a la contaminación de otros sentimientos que no tengan que ver con la piedad y el desprendimiento.

Dos grandes pintores para una ciudad pequeña

Una obra de Alguacil que recuerda a Monet. En la calle Pizarro de La Vila Joiosa, probablemente una de las arterias principales de la ciudad (o pueblo, los que me habéis leído sabéis que los uso indistintamente en referencia a mi lugar de nacimiento) hay abierto desde tiempos inmemoriales un taller de un gran pintor: Evaristo Alguacil. Casi sin anunciarse, muchos aficionados a la pintura han insistido hasta recibir sus clases y quién más o quién menos conoce lo más representativo de su trabajo, sobre todo al óleo, principalmente esas marinas tan personales, tan vileras y universales al mismo tiempo. Sin embargo, pocos, en relación a la categoría del artista, conocen bien la obra de Alguacil. Creen que es un señor que repite cuadros sobre las casas de colores representativas de La Vila o se dedica solamente al puerto y sus barcos de pesca. Es cierto, y él lo reconoce, que son parte de su sello personal y la gente aprecia estas pinturas por dos motivos: por su calidad y, además,