Ir al contenido principal

Una ciudad de recuerdos

Y de repente crecieron edificios.
Desde la ventana ya no se ve el jardín que imagínabamos tras la maleza y los árboles antiguos. Hace muchos años que estaba ahí, pero los próximos inquilinos no lo sabrán.

Ahora vemos el suelo de hormigón y los aparatos de aire acondicionado de los vecinos, que siempre estuvieron ahí.

Las flores de los árboles que anunciaban la primavera tampoco están. Pero estará el bullicio de los clientes de los dos restaurantes que prolongan sus instalaciones modernas por el patio.


Ayer salimos a dar un paseo por el Raval con un guía que por momentos nos mostraba fantasmas. Ahí había una farmacia con la fachada modernista, allá una plaza, por allí bajaban dos calles, y de las bodegas quedan dos, y de los quince conventos, dos también. Y la muralla la echaron abajo, pero hace unos años la querían reconstruir, aunque no se sabe nada.

La memoria se extingue. Quedarán linces ibéricos en protobosques semisalvajes. En la ciudad, libros antiguos, guías con más o menos recuerdos, láminas y a cada local de ocio de diseño o parque de hormigón, la sensación de que en sus cimientos se escuchan los susurros de los recuerdos de una ciudad que lució con menos artificio y sucumbió al progreso.

Comentarios

Entradas populares de este blog

GTA V no es un juego para niños

He sido monaguillo antes que fraile. Es decir, he pasado por una redacción de una revista de videojuegos y desde hace más de cinco años me dedico a la docencia. De hecho, cuando nuestro Gobierno y la molt honorable Generalitat quieran, regresaré a los institutos y me dedicaré, primero, a educar a los alumnos y, en segundo lugar, a enseñarles inglés. Por este orden. Calculo que más de la mitad de mis alumnos de ESO (de 12 a 16 años) juegan a videojuegos con consolas de última generación, esto es, PlayStation 3 y Xbox 360 (dentro de unos meses, esta información quedará obsoleta: hay dos nuevas consolas a la vista). Deduzco, a su vez, que de este alto porcentaje de estudiantes, la mayoría, y no sólo los niños, querrá hacerse con el último título de la saga GTA: la tan esperada quinta parte.

Redescubriendo temas musicales: Jesus to a child

Las canciones que más adentro nos logran tocar son, en ocasiones, las más sencillas. La letra de Jesus to a child descolocará a los que asuman, por desconocimiento, que la belleza de la expresión escrita requiere complejidad. La sintaxis es clara, el vocabulario, sencillo, y la composición en su conjunto constituye una metáfora: el amante sufre la pérdida del ser querido, pero a pesar de la tristeza es capaz de comparar el hallazgo del amor verdadero con la limpieza de corazón con la que Jesucristo amaba a los niños, que son, por antonomasia, los seres humanos más puros que existen. Por este motivo, mucha gente interpreta la letra como una exaltación de los sentimientos nobles y, en realidad, la letra se puede explicar en clave de amistad idealizada o de amor perfecto en cuanto en tanto no deja lugar a la contaminación de otros sentimientos que no tengan que ver con la piedad y el desprendimiento.

Empleados más puteados del mes (Cash Converters)

Es una franquicia que no ha dejado de crecer con la crisis. Sin embargo, y a pesar de abrir nuevos locales, todo apunta a que les va fatal. Lo primero que percibes es que los empleados no cobran incentivos por vender más, o si los reciben, son de pena. Haz la prueba. Intenta entrar cuando quedan diez minutos para el cierre. De repente, todos desaparecen hasta que a menos ocho minutos una voz cavernosa te invita a marcharte. Inmediatamente, la persiana cae como si fuera confeti. Luego está el mal rollo entre ellos. El otro día un señor me atiende en la zona en la que te compran los productos, bastante sórdida siempre, y llegan dos compañeros con un avioncito teledirigido. Poco más y se los come. Delante de mí y sin reparos, les echó una bronca de mil demonios.